Las ciudades de Santiago y Santo Domingo han sido agraciadas con la instalación de sistemas semafóricos más modernos, que permiten un mayor ahorro de energía y en algunos casos informan sobre que tiempo permanecerán en una determinada luz.
Este tipo de semáforos permiten un ahorro entre 70% y 85% de la energía eléctrica consumida con relación a los anteriores sistemas instalados. Esto es debido a que la iluminación es producida por varios LEDs (por sus siglas en ingles de Light Emitting Diodes o Diodos Emisores de Luz) los cuales son una tecnología mucho más eficiente y duradera que las comúnmente utilizadas lámparas de filamento incandescente.
Otra característica interesante que poseen algunos de estos semáforos, es la pantalla indicadora del tiempo de duración de cada luz. De “forma lógica”, podríamos mencionar algunas ventajas que esto posee:
La instalación de estos semáforos viene como una consecuencia del plan de ahorro energético del gobierno de la República Dominicana y efectivamente lograrán su objetivo: Reducirán enormemente la factura eléctrica y crearán un mejor flujo vehicular en las intersecciones donde se instalen, reduciendo el consumo de combustible y la factura petrolera.
Estos logros pueden llevarse a un punto óptimo, pero para ello es necesario que se realice un plan de educación y concientización para aprender a utilizar esta tecnología. Un ejemplo de lo que se puede alcanzar es lo siguiente:
Si cada conductor apaga el motor de su vehículo cuando se encuentre en una luz roja que dure mas de 40 segundos, dicho individuo se economizará cierta cantidad de combustible y el Estado mismo reducirá en gran medida su consumo petrolero. Hagamos los cálculos:
Este tipo de semáforos permiten un ahorro entre 70% y 85% de la energía eléctrica consumida con relación a los anteriores sistemas instalados. Esto es debido a que la iluminación es producida por varios LEDs (por sus siglas en ingles de Light Emitting Diodes o Diodos Emisores de Luz) los cuales son una tecnología mucho más eficiente y duradera que las comúnmente utilizadas lámparas de filamento incandescente.
Otra característica interesante que poseen algunos de estos semáforos, es la pantalla indicadora del tiempo de duración de cada luz. De “forma lógica”, podríamos mencionar algunas ventajas que esto posee:
- Reducción de las imprudencias cometidas por algunos conductores
- Reducción del ruido de las bocinas
- Reducción del embotellamiento después del cambio de luz, entre otras
La instalación de estos semáforos viene como una consecuencia del plan de ahorro energético del gobierno de la República Dominicana y efectivamente lograrán su objetivo: Reducirán enormemente la factura eléctrica y crearán un mejor flujo vehicular en las intersecciones donde se instalen, reduciendo el consumo de combustible y la factura petrolera.
Estos logros pueden llevarse a un punto óptimo, pero para ello es necesario que se realice un plan de educación y concientización para aprender a utilizar esta tecnología. Un ejemplo de lo que se puede alcanzar es lo siguiente:
Si cada conductor apaga el motor de su vehículo cuando se encuentre en una luz roja que dure mas de 40 segundos, dicho individuo se economizará cierta cantidad de combustible y el Estado mismo reducirá en gran medida su consumo petrolero. Hagamos los cálculos:
- Un vehículo sedan consume aproximadamente 0.52 cc de gasolina por segundo con el motor detenido.
- Un conductor, se queda detenido en una luz roja por lo menos 5 veces al día durante 60 segundos.
- Diariamente, el conductor esta perdiendo por cada parada en la luz roja 60 X 0.52 = 31.2 cc de combustible y al día representa 156 cc de combustible.
- Un vehículo consume aproximadamente 16 cc de combustible en el encendido.
- Si el conductor, apaga su vehículo en cada luz roja de 60 segundos, se ahorrará por parada: 31.2 – 16 = 15.2 cc de combustible, representando al día 76 cc ahorrados. En un mes, el conductor se habrá ahorrado un total de: 76 cc X 30 = 2,280 cc lo que convertido a galón es un ahorro de 0.6 galones de combustible.
- Si extrapolamos esta cifra a 1,000,000 de conductores, el Estado se habrá ahorrado: 600,000 galones de combustible o 15,000 barriles de petróleo por mes.
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